martes, 14 de julio de 2020

Ranero: "El Hombre de las Tabernas"

Escalada clásica en Ranero (Bizkaia, entre Karrantza y Ramales): El Hombre de las Tabermas (6a+, 6a, 6b, 6a, V: 120m)

Tarde con tiempo estable e incluso temperaturas moderadas (aunque la humedad nos hará pasar calor igual), por lo tanto no hay excusa para seguir "peinando" los muros del Ranero. Hoy le tenemos hechado el ojo a "El Hombre de las Tabernas", una vía que parece accesible aun y sabiendo que Ranero no nos regalará nada (¡Y más cuando no va uno tan sobrado de grado como para cacharrear agusto en dichas dificultades!)

La aproximación a las vías de Ranero siempre la hemos hecho desde el parking de las cuevas de Pozalagua. Hoy sin embargo, probaremos a subir desde el valle. Precisamente, llegamos a la conclusión de que excepto para hacer las vías que quedan más a la derecha de la "Maiatzak 14" es la mejor opción. Un poco más de desnivel pero más comodo e incluso más rápido


Croquis de los aperturistas. Matizar que el segundo largo se podría dejar en 6a 

Para llegar al punto de partida en vehículo, debemos de cojer un desvío a la izquierda marcado con un cartel "Venta del Monte" en la carretera de Gibaja a Karrantza. Tras unos metros de ligero ascenso, en lo que vemos un claro del bosque de explotación forestal que sale a nuestra derecha una pista forestal, podemos estacionar ahí mismo el vehículo en un margen (no llega a ser parking)
Los muros del Ranero son visibles cuando salimos de la furgo. Se ve de hecho el paño de "El Hombre de las Tabernas" en el centro.


La aproximación desde aquí no tiene más misterio que seguir las curvas de la pista forestal con nuestras paredes como referencia. Si vemos que nos alejamos mucho de ellas, atentos a buscar algún desvío que nos lleve en nuestra dirección.
Directos ya hacia nuestro paño!

Según las paredes van quedando cerca nuestro y la subida se endereza, ya no tenemos pistas y debemos proseguir por sendas
El boquete de la cueva por la que pasa nuestra vía en su tercer largo puede ser tomado de referencia. En un principio encontraremos una senda en dicha dirección...

...pero finalmente para llegar a pie de vía nos tocará pincharnos un poco campo a través!

Disfrutando la ortigada de rigor por traer pantalones cortos jejeje

Ver la guapa agua del Ranero cercana nos es una buena referencia de que estamos en nuestro pie de vía
Aguja del Ranero. Habrá que probar algún día su "Vida Normal"!!! :)

Examinando el primer largo. El comienzo lógico empieza unos 3 metros más a la derecha de donde está mirando Alex.

Y para situar el punto exacto desde el cual comenzar a abordar la pared podemos tomar de referencia un puente de roca con la tipología de las formas que la roca hace en zonas costeras (Nos puede recordar a Ogoño, por ejemplo) a un par de metros del suelo. Por otro lado, si miramos arriba veremos un puente de roca lazado en el techito que tenemos que cruzar de izquierda a derecha,
Escalando los primeros metros del L1: como primer seguro lazamos el puente de roca comentado de referencia, aunque casi que para poco sirve ya que el primer paso no tiene dificultad y está muy cerca del suelo como para proteger en los que subes unos metros

El primer largo es un zigzagueante 6a+ con un pasito largo fino para superar una placa bastante lisa y llegar al primer parabolt, además de otro pequeño arreón tras hacer la travesía bajo el techito. Entre la sudada + ortigada y la tensión de comenzar, aprovecho el parabolt y un clavo para quitarme un poco la tensión colgandome un minuto jeje, pero por lo demás sale sin problemas.
Apunto de abordar el paso clave

Llegando a la R1. Buen lío para gestionar los péndulos teniendo que volver atrás a chapar la otra cuerda...atención con ello si se va cordadas de tres, que esta vía es todo traves

El segundo largo (6a en nuestra opinión aunque en el croquis sale como 6a+) sale a la derecha por la gran canal evidente hasta llegar a un puente de roca como referencia...
Pasado el puente de roca

...a partir del cual se tira por la placa en travesía hacia la izquierda, por una pseudo-repisita bastante evidente hacia los árboles que tenemos a la izquierda
Travesía de 6a hacia la izquierda por la placa hacia los árboles

...que así de bonita se ve desde donde se da el giro tras el puente de roca

Se llega así a la R2, que está junto a la gran cueva que veíamos en la aproximación aun y apenas no apreciable desde aquí por la vegetación que ha crecido en su interior. Aquí empieza pues el largo clave de la vía: un 6b (blandito: en algunos croquis aparece como 6a+/b de hecho. Pero creo que no está mal redondeado a 6b) de cantos buenos pero que llega incluso a desplomar un poco. Un largo BRUTAL!!!

Este largo comienza en travesía hacia la izquierda...

...hasta cruzar el espolón tal cual en esta foto lo hace el compa 

Tras ello se sale a esta placa. Donde tenemos el parabolt tenemos que ir algo más de un metro a la izquierda para superar este primer paso (recto podría salir con un lance hasta el invertido donde se cruzan las cuerdas en la foto, pero ya no sería 6b :P)

Esa misma sección desde arriba

La verdad que los dos segundos al menos jeje disfrutamos muchísimo este largo (El primero al parecer también aun y tensión a tope con rotura de canto incluída jeje): Un patiazo increíble sobre roca buenísima
Ya desde la R3: Larga travesía hacia la derecha... 

...con un paso largo para pasar la zona superior de la cueva donde por ella la pared más desploma...

...y una llegada a la reu también con su arreón!

Por ahí debe de ir la Gautxori!!

...y en dirección opuesta, la aguja del Ranero es preciosa 

El cuarto largo es una cortita travesía en diagonal por una fisura horizontal a la derecha (la continuación evidente). Un 6a muy facil de leer pero algo física
Dándole al L4. ¡Yo que quería cacharrear agusto en esta sección, y resulta que después del clavo encuentro varios puentes de roca con los que sales ya a terreno sencillo! Jeje 

Tras salir de la fisura horizontal toca cruzar un jardín diagonal hasta llegar a un buen árbol en el que montar reu lazándolo. Creía que esta vía sería algo más repetida, y nos encontramos sin embargo el jardín sin rastro de paso, necesitando de hecho doblar arbustos para poder avanzar.
Hay que hacer un poco el tarzán jeje

El quinto largo es el más largo (cerca de 50 metros). Se trata de salir de la tapia por lo más sencillo, hacia la derecha casi hasta el final. Es un V, por tanto no con tanto ambiente de tapia pero disfrutón igualmente. Algunos tramos son casi andar por la repisa...
...en larga travesía a derechas...

Pero especialmente al final tiene un arreón (lo hace casi merecedor de "V+") para superar un par de muros, pero con excelente canto. Disfrutón. 
A punto de salir de la vía por los últimos muros a superar 

Como siempre últimamente en Ranero, la salida de la vía coincide con los colores del atardecer tiñiendo el paisaje
Justo desde la salida de la vía, hacia la zona de Ramales/Hornijo...

Una vez salidos de la tapia, queda todavía remontar la canal hacia arriba para salir a la meseta superior del Ranero
Canal arriba.

Desde la meseta del Ranero, enfilaremos al descenso típico cuando se hace la aproximación desde el valle: por los rápeles de "El Descargadro". Para llegar a ellos deberemos de conectar con un PR con el que coincidiremos si seguimos un poco hacia la izquierda a la salida de la canal. Para orientarnos, podemos tener en cuenta dónde hemos dejado la muralla y que los rápeles quedan en su parte más izquierda. Dirección Noroeste. Dicho sendero nos descenderá hacia una vaguada que al Oeste queda cortada por los precipicios de los muros del Ranero. Ahí encontraremos "El Descargadero"
Hacia "El Descargadero", apunto del anochecer...

Por "El Descargadero" rapelaremos la muralla del Ranero por este extremo. El primer rapel se hace desde una viga (la izquierda en concreto, que es la que tiene las puntas redondeadas), y tras descender unos 50 metros con un tramo algo volado pegado a un diedro, encontraremos una cadena desde la que descender ya hasta el suelo 
"El Descargadero"

Se enredaron las cuerdas y acabó por caer del todo la noche comenzando los rapeles jeje

Tras los rápeles, campo a través aunque intentando enlazar sendas con las que nos cruzamos y con la única referencia de las luces del barrio al lado de donde hemos dejado el coche, descendemos hasta las pistas forestales por las cuales con unas zetas llegamos por fin al parking allá hacia las 12 de la noche. 

La conclusión es la misma que después de todas las vías en Ranero: Que es una gozada tener un muro de estas dimensiones y características "al lado de casa" y que nos vamos con muchos proyectos pendientes (parece que la "Gautxori" seduce para ser la próxima :P). "El Hombre de las Tabernas" ha sorprendido gratamente, con una sensación de tapia vertical mayor a la de las previas vías que hemos hecho, sobretodo por la belleza del tercer largo (Aunque ninguno tiene desperdicio).


Agur!!!

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